El Deportivo afronta el sábado un examen en Las Llanas, uno de esos estadios que en otra época eran sinónimo claro de tropiezo blanquiazul y que en esta temporada están sacando lo mejor del equipo coruñés. El conjunto de Imanol Idiakez, el mejor visitante del Grupo 1 de Primera Federación, ya ha demostrado a lo largo del presente curso su capacidad para adaptarse a escenarios complicados, campos de dimensiones inferiores a Riazor, rivales potentes como locales e incluso superficies en mal estado. El sábado tiene la oportunidad de confirmar su versatilidad lejos de A Coruña contra un Sestao River que precisamente ha ganado los cuatro últimos compromisos que ha disputado en su feudo.
Remontada en La Pinilla
Uno de los claros ejemplos de esta versión sólida y pragmática del Deportivo a domicilio se produjo en la salida más reciente a Teruel. El equipo herculino venció al conjunto aragonés (1-3) en La Pinilla, uno de esos estadios considerados ratoneras por su condición de trampa para los visitantes. Las dimensiones de 103x65 metros, inferiores a las de Riazor (105x68), no impidieron el triunfo blanquiazul a pesar de que el Teruel se puso por delante en el marcador con un gol de Borja Martínez. No obstante, un doblete de Barbero y una buena segunda mitad del Deportivo culminada con la sentencia de Yeremay bastaron para imponerse a un Teruel que en ese momento era el cuarto mejor equipo de la segunda vuelta.
Punto de infelxión en Espiñedo
La primera victoria de la temporada a domicilio en uno de esos terrenos de juego que acostumbraba a despertar el pesimismo de la afición fue en O Espiñedo. El Depor visitó el feudo del Arenteiro en diciembre cuando el cuadro ourensa únicamente había perdido en casa su segundo partido de la temporada. En este caso, las dimensiones de O Espiñedo son iguales a las de Riazor pero la cercanía del público y el estado del césped lo convierten en un campo propicio para el tropiezo visitante. Sin embargo, el Depor supo reponerse a un error de Pablo Martínez, que castigó Miku haciendo el 1-0, y Davo, que anotó un doblete, salvó la cabeza de Imanol Idiakez por segunda salida consecutiva (1-2) en un partido que, de conseguir el ascenso, será recordado como un gran punto de inflexión en la campaña blanquiazul como el triunfo cosechado en el Johan Cruyff ante el Barça Atlètic.
Autoridad en Tajonar
Otro ejemplo de la capacidad de adaptación del Deportivo en la actual temporada a todo tipo de escenarios se dio en la visita a Osasuna Promesas. La intensa lluvia convirtió Tajonar en una piscina pero el equipo de Imanol Idiakez saltó al terreno de juego con tal seriedad y personalidad que finiquitó el encuentro antes de que el campo llegase a estar impracticable. Barbero anotó un ‘hat-trick’ ante su ex equipo y Lucas puso el broche a la goleada (0-4) antes de que se cumpliese la hora de partido.
Saber sufrir en la Dani Jarque
El Deportivo también salió victorioso de otra visita a una Ciudad Deportiva, en este caso la del Espanyol, en la que se enfrentó al Cornellà en la jornada 30. El conjunto herculino supo sufrir en la Ciudad Deportiva Dani Jarque en un encuentro incómodo en el que un solitario tanto de Hugo Rama después de una gran jugada colectiva le bastó para lograr el triunfo (0-1).
Estos son cuatro ejemplos de las diez victorias a domicilio que acumula el Deportivo, que también consiguió ganar lejos de Riazor en otro tipo de terrenos de juego como el Anxo Carro, Balaídos, la Nova Creu Alta, Las Gaunas o el Johan Cruyff. Son cuatro ejemplos de la versatilidad y seriedad de los blanquiazules en escenarios que en temporadas anteriores eran ‘1 o X’ en la quiniela. Sin embargo, el Depor de Idiakez ha demostrado que tiene argumentos para salir indemne de Las Llanas (102x64).
Ya lo dijo Raúl Alcaina el pasado martes en rueda de prensa: “Desde que estoy aquí he visto competir bien al equipo en todos los escenarios”. Si esta frase sigue vigente el sábado al término del partido ante el Sestao, el Depor tendrá muy cerca el ansiado regreso a Segunda División.
